Hilma af Klint
Hilma af Klint (1862-1944), artista sueca y pionera del arte abstracto. Fue una innovadora radical de un tipo de arte que daba la espalda a la realidad visible. Desde 1906 desarrolló un lenguaje abstracto. La obra de Hilma af Klint no es una abstracción real del color y la forma en sí mismos, sino que trata de modelar lo invisible. Esto sucedió años antes de que apareciera la obra de Wassily Kandinsky, Piet Mondrian y Kazimir Malevitj, que aún son tratados como los precursores del arte abstracto a principios del siglo XX.
Hilma af Klint comenzó su educación artística en la Escuela Técnica de Estocolmo (hoy en día Konstfack), incluso tomó lecciones de retrato. Entre 1882 y 1887 estudió en la Academia de Arte (Konstakademin). Tras su época estudiantil hasta 1908, pintó y expuso retratos y paisajes de estilo naturalista.
Tras abandonar el lenguaje figurativo naturalista. Hilma af Klint parte de la base que existe una dimensión espiritual en la existencia y quiere hacer visible el contexto que existe más allá de lo que el ojo puede ver. Al igual que otros de sus contemporáneos, ella está muy influida por las corrientes espirituales de la época, particularmente el espiritismo, la teosofía y la antroposofía. Tiene la conciencia de que cuando pinta mantiene un nexo de unión con un conocimiento superior que envia un mensaje a través de ella. Su pintura explora la existencia húmana en diferentes dimensiones.
Hilma af Klint realizó más de 1000 trabajos, entre pinturas y obra en papel. En vida, expuso su obra temprana y figurativa, pero nunca la abstracta. En su testamento redactó que su obra abstracta no se expusiera en público hasta veinte años después de su muerte, dado que estaba convencida de que hasta entonces no se podría valorar y comprender su obra en su justa medida.